A partir del mes de octubre se comenzará a trabajar en un proyecto denominado “El Agua y la Vida”, que tiene el fin de posicionar a la Laguna del Cisne como un punto de referencia de lo que se conoce como “turismo natural”, generando oportunidades de desarrollo para los habitantes de su entorno. Desde lo cultural, se pretende también trabajar sobre la temática medioambiental con diferentes instituciones educativas de todo el país. La idea es crear un centro de interpretación de toda la temática del agua, teniendo como eje a la escuela de Sosa Días. En ese sentido, el proyecto ha sido declarado de interés de parte de la ANEP.
Entre los trabajos a realizar, se pretende montar un mirador para poder observar la laguna, colocar cartelería adecuada, mejorar los caminos de acceso y confeccionar valijas didácticas que estarán a disposición de los visitantes.
Por otro lado, se va a crear un registro de productores con potencial para desarrollar el turismo natural. Se montará una cocina, con todos los elementos necesarios, en la que mujeres rurales ofrecerán sus platos basados en un recetario Casero.

El Proyecto “El Agua y la Vida” demandará una inversión inicial de U$S 50.000, a los que nuestros municipios accedieron al ser seleccionados en el marco del programa de la OPP denominado “Gobiernos Locales: Desarrollo sostenible y equidad”, que cuenta con la financiación de la Unión Europea.
Turismo rural acá nomás
Para el alcalde de Atlántida, Gustavo González, tanto el tema de la Atlántida Rural, como la conservación del agua, siempre han estado entre sus prioridades. Por ese motivo se muestra muy comprometido con este proyecto.
“Le vemos un potencial enorme, porque a partir de la difusión es donde empezamos a avanzar de verdad”, nos dijo. “Nos motiva mucho el poder acercar la ruralidad a lo urbano. Mucho más, en lo que tiene que ver con lo cultural, a través de las escuelas”.

González asegura que los tres municipios articuladores tienen mucho que mostrar. “Salinas tiene un área rural maravillosa, con haras de caballos, una sociedad criolla que trabaja muy bien, la gente de La Montañesa que está haciendo una cantidad de cosas. Empalme Olmos ni que hablar. Si tendremos rincones para mostrar…”
El alcalde le asigna una importancia crucial al proyecto, en el sentido que apunta a “salir de la zafralidad del verano” y considera que existe una gran oportunidad para que nuestra costa se pueda ir posicionando como un destino turístico de todo el año. “Vos fíjate que hay gente que sale de Montevideo y recorre cientos de kilómetros para hacer lo que se llama turismo rural. Nosotros preferimos llamarlo Turismo Natural y creemos que no hay que ir tan lejos. Miremos la gran cantidad de autos que pasan por la Interbalnearia y siguen de largo. En la medida que tengamos más opciones, los vamos a poder retener en nuestro territorio, generando un poco más de producto bruto interno para acá. Nosotros creemos que es posible y queremos hacerlo junto a la pequeña y mediana empresa”, aseguró.